Una de las articulaciones más móviles del cuerpo humano y la que más lesiones sufre es el hombro. Se trata de una articulación con una anatomía compleja y que está compuesto por diferentes estructuras que permiten el movimiento, sin embargo, dicha articulación puede peligrar si se da el caso del síndrome del hombro congelado.
Estamos hablando de una patología que afecta de manera directa al hombro, privando a los que la padecen de las actividades cotidianas, dado que impide el movimiento del brazo. Se estima que un 2% de la población padece esta dolencia, siendo más común en personas adultas de entre los 40 y los 60 años de edad y en especial, en las mujeres.
Índice
¿Qué es el hombro congelado?
El hombro congelado, asimismo llamado capsulitis adhesiva es una enfermedad que genera una disminución progresiva del movimiento del hombro en cuestión, puesto que los ligamentos de dicha articulación se inflaman y se retractan. Es una lesión de hombro que además causa rigidez y dolor en el hombro.
El hombro es una articulación de forma esférica que está formada por el húmero, el omóplato y la clavícula. Esta articulación está envuelta de un tejido conjuntivo resistente y fuerte, conocido como cápsula del hombro. En el interior de dicha cápsula hay el llamado líquido sinovial que lubrica el hombro para dar lugar al movimiento con más facilidad.
[bctt tweet=»Cuando aparece el síndrome del hombro congelado, la cápsula del hombro se solidifica, espesándose mucho y desarrollando adherencias (bandas de tejido rígidas), las cuáles evitan el movimiento natural del hombro y desaparece parte del líquido sinovial.» username=»»]
Fases de la patología
Podemos diferenciar la enfermedad con 3 fases o etapas distintas:
- Fase dolorosa o congelamiento: En esta primera etapa de la enfermedad, el paciente comienza a sentir el característico dolor del hombro congelado, perdiendo el rango de movimiento a medida que dicho dolor aumenta. Habitualmente, esta fase suele durar de 6 semanas a 9 meses.
- Fase adhesiva o congelado: En la siguiente etapa el dolor puede disminuir, no obstante, la rigidez perdura, haciendo muy dificultoso el día a día. Esta fase generalmente pude durar de 4 a 6 meses.
- Fase de recuperación o descongelado: En esta última fase el paciente va mejorando, ya que la rigidez del hombro va disminuyendo poco a poco. Lo más frecuente es que la recuperación del movimiento, así como de la fuerza, tenga una duración de 6 meses a 2 años.
Síntomas habituales del hombro congelado
Tal y como hemos mencionado con anterioridad, esta patología crea reales dificultades al paciente para desenvolverse en la vida cotidiana, puesto que afecta de manera directa a una de las articulaciones más utilizadas. Los síntomas que se manifiestan más comúnmente en esta enfermedad son los siguientes:
- Movimiento limitado. Uno de los síntomas más característicos de la capsulitis adhesiva es la rigidez, que limita el movimiento. Esto hace que los afectados tengan serias dificultades para realizar actividades del día a día como vestirse, peinarse o incluso poder llegar a acceder al bolsillo trasero de un pantalón.
- Dolor intenso. En general, los pacientes son incapaces de dormir sobre el hombro dañado a causa del dolor. Existen pacientes que dejan de sentir dolor o disminuye considerablemente, tras perder la movilidad total del hombre. Aun así, el dolor vuelve a reaparecer al tratar de mover el hombre más allá de los límites de su extrema rigidez. Asimismo, si la persona lleva a cabo un movimiento repentino, como por ejemplo coger un objeto de forma rápida, el dolor se agravará y será más agudo.
- Inflamación. Los tejidos musculares que rodean la articulación se inflaman a raíz de la enfermedad, añadiendo un dolor extra articular al hombro que intensifica el padecimiento.
Causas del hombro congelado
A día de hoy, no existen unas causas claras que desarrollen esta enfermedad. No obstante, hay algunos factores de riesgo que pueden hacer a los pacientes más propensos al hombro congelado.
De entre un 10% a 20% de las personas afectadas de diabetes, asimismo sufren de esta patología del hombro. No existe una conexión clara del motivo todavía.
Por otro lado, se sabe que algunas enfermedades tales como el hipotiroidismo, el hipertiroidismo, la enfermedad de Parkinson y la enfermedad cardíaca están también asociadas con esta dolencia.
El hombro congelado puede llegar a desencadenarse por una inmovilización. Es decir, después de mantener a la articulación del hombro sin movilidad debido a una operación, una fractura u otro tipo de lesión. Es por ello que se recomienda siempre mover el hombro tras una inmovilización de estas características.
¿Qué tipo de tratamientos existen?
Los tratamientos para la capsulitis adhesiva se centran en controlar el dolor y poder restablecer de nuevo el movimiento del hombro, así como la fuerza.
Hay dos tipos de tratamientos según la gravedad de la enfermedad que se diferencian entre los casos que necesitan operación y los que no. El especialista dictaminará el mejor tratamiento a seguir según cada paciente y el estado de su hombro congelado.
Tratamientos no quirúrgicos
Los tratamientos más frecuentes en los casos moderados suelen ser bastante efectivos, ya que se estima que mejoran al paciente, controlando el dolor y devolviendo el movimiento, en más de un 90% de los pacientes. Las medidas que se emplean suelen ser las siguientes:
Los medicamentos antiinflamatorios como el ibuprofeno, reducen el dolor y la inflamación, pero si el dolor persiste, en algunos casos hay que optar por las inyecciones de esteroides. La cortisona es un potente antiinflamatorio que se inyecta directamente en el hombro para el manejo del dolor.
Complementando los medicamentos con ejercicios físicos de recuperación, se podrá restablecer el movimiento. Dichos ejercicios pueden ser recomendados y seguidos por un doctor, pues se trata de estiramientos para devolver al hombro su movilidad.
Tratamientos con cirugía
Cuando el hombro congelado no mejora con lo mencionado anteriormente y el médico experto lo recomienda, se podrá solventar con una operación quirúrgica. Se trata de un método llamado artroscopia del hombre y sirve para estirar y liberar la cápsula del hombro que se ha solidificado. Este procedimiento se hará siempre bajo anestesia.
Tras la cirugía, es necesario seguir una terapia física de recuperación para mantener el movimiento logrado con la operación.
Recuerde que si tiene molestias en el hombro o en cualquier parte de su cuerpo, los traumatólogos especializados de la Clínica Martín Gómez están preparados para ayudarle y brindarle la solución que necesita. No lo dude y pida cita en el portal.