La rodilla es una de las articulaciones más complejas que tienen los seres humanos en el cuerpo, y es propensa a lesionarse, lo que puede dar lugar a dolor en la rodilla al andar. Vamos a ver las lesiones de rodilla más habituales que pueden estar provocando el dolor y posibles soluciones.
Índice
Principales causas del dolor de rodilla al andar
El dolor de rodilla al andar es un síntoma que puede aparecer por el desgaste de la articulación, exceso de peso o a las lesiones deportivas, que cada vez son más frecuentes en nuestra sociedad.
Sin embargo, cuando el dolor en la rodilla imposibilita caminar o va empeorando con el paso del tiempo, puede ser que tengamos un problema más grave en la articulación como una rotura de los ligamentos, osteoartritis o quiste de Baker.
A pesar de ello, no queremos crear miedo, ya que en la mayoría de los casos los motivos no son graves y puede tratarse en casa aplicando hielo 2 veces al día durante los primeros días de dolor. Además también se puede usar una rodillera que ayude a inmovilizarla, disminuyendo el dolor.
Veamos un poco más en profundidad cuáles son las causas más frecuentes:
Dolor en la parte lateral de la rodilla al caminar
Este dolor se suele producir por el síndrome de fricción de la banda iliotibial. Normalmente se trata con antiinflamatorios, estiramientos y liberación miofascial. Otras lesiones que predisponen a sufrir este dolor son los problemas en el menisco lateral o en el ligamento colateral lateral externo de la rodilla.
Dolor en la rodilla en la zona interna
Normalmente se produce por un esguince de la rodilla o por un golpe en la parte lateral de la rodilla. Los síntomas suelen ser una inflamación en el lado opuesto al del golpe, tendinitis de la pata de ganso, lesión en el ligamento colateral medial o incluso una rotura del mismo menisco medial.
Dolor en la zona posterior de la rodilla
El dolor en esa zona se suele producir por un quiste de Baker, una pequeña inflamación en la parte posterior de la rodilla y que provoca aumento del dolor en el paciente cuando dobla la rodilla al andar o cuando se agacha.
Dolor al despertarse
Es frecuente entre las personas de más de 40 años Normalmente se relaciona con artritis reumatoide. El dolor suele aparecer durante los primeros minutos de la mañana al levantarse, y va mejorando conforme vamos moviendo la articulación.
Dolor en la rodilla al doblar la articulación
La causa más habitual es la condropatía rotuliana, que consiste en el desgaste de la articulación alrededor de la rotula. También puede ser por una lesión en el menisco.
Dolor en la rodilla al andar
A últimas horas del día o cuando pasamos mucho tiempo de pie, puede empezar a doler la rodilla. Esto es señal de una posible artrosis de rodilla, que es un desgaste de la articulación que conforme se va agravando, suele degenerar en rigidez en la rodilla después de estar inmóvil.
Dolor en la parte frontal de la articulación
Lo normal es que sea una condromalacia rotuliana. El dolor puede llegar a limitar muchas de las tareas diarias que tenemos que hacer.
Dolor al flexionar la rodilla
Principalmente se puede deber a un problema con el menisco de la rodilla.
Dolor al estirar la pierna
Puede ser por una lesión en el tendón rotuliano o incluso por la rotura del ligamento rotuliano.
Dolor por toda la articulación
Lo más normal es que se deba a un traumatismo por caída y que la rodilla se golpee contra el suelo. También se puede producir por una torsión o la rotura parcial de algún ligamento.
Crujido al mover la rodilla
Es una señal de una lesión en el ligamento cruzado anterior, en el ligamento posterior, ligamento coronario, rotura del menisco o fractura osteocondral.
Dolor al subir escaleras
Generalmente se puede deber a tres patologías: artrosis, problemas en el menisco o una lesión osteocondral.
Dolor cuando bajamos escaleras
Síntoma claro de una lesión en la rótula.
Inflamación sin que haya golpe
Por lo general, se puede deber a una hemofilia, artritis reumatoide, una infección articular o gota.
Dolor en el medio de la rodilla
Señal de que estamos ante una rotura de los ligamentos cruzados anterior o posterior.
Factores de riesgo
Son varios factores que incrementan el riesgo de sufrir problemas de rodilla. Los más importantes son:
- Sobrepeso. Tener sobrepeso hace que la exigencia sobre las rodillas sea mayor, incluido las actividades comunes, como andar o subir y bajar escaleras. Además, también es un factor de riesgo para sufrir artrosis al acelerar la rotura del cartílago.
- Falta de fuerza muscular o flexibilidad. Este factor puede incrementar el riesgo de lesiones en las rodillas. La fortaleza muscular ayuda a estabilizar y proteger las articulaciones. Por su parte, la flexibilidad nos da una mayor amplitud de movimiento.
- Determinados trabajos y actividades deportivas. Algunos deportes suponen una exigencia para nuestras rodillas. Por ejemplo, el esquí con botas rígidas y sus potenciales caídas, los saltos y giros en el baloncesto y el impacto repetido que absorben las rodillas al correr aumentan el riesgo de lesiones en las rodillas. Por su parte, hay trabajos como la construcción o el cultivo, , que por un reiterado esfuerzo también pueden aumentar el riesgo.
- Lesiones previas. Tener alguna lesión de rodilla anterior hace que sea más probable que volvamos a sufrir otra lesión posterior en la rodilla.
Cuándo consultar al traumatólogo
Hay una serie de signos que nos tienen que alertar para acudir al especialista:
- No podemos soportar el peso en la rodilla o sentimos como si la rodilla estuviese inestable.
- Sufrimos una hinchazón importante en la rodilla.
- No podemos flexionar la rodilla en su totalidad o problema para extenderla.
- Tenemos una deformidad en la rodilla
- Se juntan el dolor, con una inflamación, enrojecimiento y fiebre.