El tobillo es una de las articulaciones más importantes para poder andar y realizar las actividades cotidianas de nuestro día a día. Son varias las lesiones que puede causar el dolor en el tobillo, por este motivo vamos a hacer un recorrido por los motivos más habituales y cómo se pueden tratar para solucionarlo.
Índice
Articulación del tobillo
El tobillo es la articulación que sirve de unión entre el pie y la pierna. La principal función es la de garantizar una adecuada transmisión de fuerzas hacia el pie cuando caminamos.
El pie es el punto más distal de las extremidades inferiores. Conforma la base que sustenta el aparato locomotor. Posee una biomecánica muy especial. Gracias a ella pasa de ser una estructura rígida a flexible, o viceversa, en función de las características del terreno.
La articulación del tobillo es una parte fundamental en ese engranaje. Se dice que es una de las más congruentes del organismo. Esto quiere decir que opera de forma muy exacta. Si su morfología es la correcta, contribuye decisivamente a mantener la bóveda de la planta del pie, a realizar los movimientos de extensión y flexión y a la estabilidad corporal.
Principales causas del dolor en el tobillo
El dolor de tobillo se puede deber a lesiones por sobrecarga, esguinces, fracturas o incluso a lesiones degenerativas como la artritis. También puede causar dolor el llevar tacones no bien ajustados, aunque las lesiones deportivas son las más habituales en el tobillo. Entre las causas más frecuentes del dolor de tobillo están:
- Tendinitis de Aquiles
- Rotura del tendón de Aquiles
- Bursitis
- Gota
- Osteocondritis
- Fascitis plantar
- Artritis reumatoide
- Esguince de tobillo
- Fracturas por estrés
- Síndrome del túnel tarsiano
- Síndrome del pinzamiento anterior del tobillo
- Síndrome del pinzamiento posterior del tobillo
- Artrosis de tobillo
- Luxación de tobillo
- Sindesmosis
Posibles tratamientos para el dolor de tobillo
Puesto que los tobillos son unas articulaciones que usamos todos los días para movernos, el sufrir dolor puede ser una sensación insoportable. A menudo los remedios caseros y tratamiento conservadores pueden ayudar a aliviar el dolor. Sin embargo, si el dolor persiste en el tiempo, deberemos acudir al médico. Lo normal es que el especialista nos realice una exploración física, recomiende realizar ejercicios ligeros y solicite pruebas de diagnóstico por imágenes, como rayos X.
Tratamiento Conservador
Los cuidados en casa para el dolor de tobillo va a depender del motivo que lo esté provocando. Normalmente se aplican para las lesiones más leves de la lista. Las pautas más habituales a seguir en casa son:
- Reposar el tobillo durante algunos días y tratar de no poner mucho peso sobre este.
- Poner un vendaje en la articulación. También se puede comprar una tobillera para limitar un poco el movimiento.
- Usar muletas para ayudar a liberar peso sobre el tobillo lesionado.
- Mantener el pie elevado tanto cuando se esté sentado o durmiendo. Para ello podemos colocar unas almohadas bajo el tobillo.
- Aplicar hielo en la zona dañada. Se puede aplicar durante 10 a 15 minutos cada hora durante el primer día. Esto hará que la inflamación no sea muy grande.
- Tomar ibuprofeno u otros analgésicos para calmar el dolor.
La lesión puede tardar en recuperarse por completo desde unas semanas hasta algunos meses. Una vez que el dolor y la hinchazón desaparezcan, lo normal es que el tobillo lesionado quede un poco más débil y con menos estabilidad que el otro tobillo.
- Empezar con ejercicios para fortalecer el tobillo y evitar recaídas en el futuro.
- No empezar hasta que un profesional en fisioterapia nos autorice a comenzar.
- También necesitará trabajar el equilibrio y la agilidad.
Además también puede haber otros consejos para acelerar la recuperación:
- Bajar de peso si tiene sobrepeso. El peso adicional pone tensión a los tobillos.
- Calentar antes de hacer ejercicio. Estirar los músculos y tendones que brindan soporte al tobillo.
- Evitar deportes y actividades para las que no estamos preparados físicamente.
- Verificar que el calzado es el adecuado. Evitar los zapatos de tacón alto.
- Si somos propensos al dolor o a torceduras del tobillo durante ciertas actividades, usar dispositivos ortopédicos de apoyo para el tobillo. Estos incluyen estabilizador de tobillo con férula de aire, vendajes ACE o soportes para amarrar el tobillo.
- Trabajar el equilibrio y practicar ejercicios de agilidad.
Tratamiento quirúrgico
En el caso de las lesiones más graves o que el tratamiento conservador no funcione en las lesiones leves, el traumatólogo puede recomendar pasar por quirófano para solucionar el dolor. Normalmente la operación se hace a través de una artroscopia de tobillo, lo que permite que la recuperación sea más rápida, gracias a que es una intervención mínimamente invasiva.
